Patricia Sandoval, líder pro-vida que experimentó un conmovedor caso de conversión luego de abortar tres veces y trabajar en la multinacional abortista Planned Parenthood, compartirá su testimonio por primera vez en Perú.
“Una mujer que aborta nunca lo supera. Una mujer que aborta es destruida y si la mujer es destruida, entonces el matrimonio está destruido; si el matrimonio está destruido, la familia está destruida y la sociedad se destruye. Si la sociedad se destruye, se puede destruir un país y convertirse en una cultura de muerte”, advierte.
Patricia, de padres mexicanos y nacida en Estados Unidos, ha llevado su testimonio de conversión por todo el mundo. A pesar de haberse sometido en tres ocasiones al aborto, y a haber trabajado en Planned Parenthood, encontró el perdón y la misericordia de Dios, y ahora trabaja en defensa de la vida y de la pureza.
En Planned Parenthood, recuerda, se realizaban alrededor de 40 abortos a la semana, principalmente a mujeres hispanas y afroamericanas. Su instructora le exigía que haga “todo lo posible para convencer a estas chicas que aborten. Si tienen miedo y quieren dar marcha atrás, diles que tú también tuviste un aborto; pero nunca digas la palabra bebé, debes referirte a su bebé como una cosa”.
Apenas un mes después de comenzar a trabajar en la clínica de abortos, con su depresión agravándose, decidió renunciar.
“Quiero evitar abortos y también quiero enseñarles a las familias que lo que me pasó a mí le puede pasar a cualquiera de sus hijos, y enseñarles a los jóvenes a luchar por el valor de la pureza, a amarse y tener esa dignidad que les corresponde como hijos de Dios”, asegura Patricia.